Ahora que se acercan las vacaciones de verano, los estudiantes de Jackson-Reed están dejando escapar un suspiro de alivio por haber sobrevivido a la temporada más aterradora del año escolar: los exámenes AP. Durante el mes de Mayo, es importante tener cuidado, porque los Juniors y Seniors son como zombies con falta de sueño y hartos de estar en el gimnasio hora tras hora rellenando círculo tras círculo y escribiendo ensayos. Una palabra equivocada y serás testigo de un colapso mental. 

Pero ya que han terminado los exámenes, los estudiantes están aliviados y están felices de no tener que tomar un examen AP por al menos un rato. “Me siento más aliviada, el estrés de estudiar a diario para el examen ya no está y ahora solo queda esperar los resultados,” dijo MariRene Tavera Lima, estudiante de 11° grado.

Mencionó que durante los exámenes había mucha tensión, y que los temas estudiados en clase no siempre eran los que aparecían en el examen, lo que “creaba cierto nivel de estrés y nervios al mismo tiempo.” 

Además del estrés, muchos estudiantes comentaron que los exámenes no siempre salieron según lo planeado.         

Elena Arbelaez, estudiante de 11° grado, dijo que se equivocó en el tiempo del examen de AP precálculo. Ella pensó que empezó a las 12:30 y no a las 12. “Entonces simplemente no la tome,” comentó ella. 

Asimismo, en el examen de literatura española algunos estudiantes se dieron cuenta que no habían recibido exámenes completos y que faltaban preguntas. “Lo que pasó en el examen de AP literatura fue que muchos estudiantes no tenían la pregunta 1 de la parte de respuesta libre del examen,” dijo Tavera Loma. 

Margo Lewis, estudiante de 11° grado que también tomó el examen de AP literatura comentó, “Yo estoy muy afortunada porque me dieron todo mi examen.” 

Sin embargo, también había estudiantes que pensaron que el proceso fue muy fácil. “No hubo problemas cuando tomé mis exámenes. Todo era muy fácil y no había nada que interrumpiera las logísticas de tomar los exámenes.” compartió Nathanial Rubens Goldfarb, estudiante de 12° grado. 

Parece que todos los años algunas cosas salen mal con las pruebas AP, pero este año puede haber sido más fácil que la mayoría. En lo que todos los estudiantes están de acuerdo es en que están felices de que haya terminado.